Escrito por Nina Munteanu, SF writer and Ecologist
Tuesday, August 7, 2007
Most impediments to scientific understanding are conceptual locks, not factual lacks...We know ourselves best and tend to view other creatures as mirrors of our own constitution and social arrangements.
—Stephen Jay Gould, Bully for Brontosaurus
The evolution of species naturally arises from its response to its landscape, climate, access to shelter and nourishment, as well as the nature of its interaction with its community (e.g., competition and cooperation).
In a previous post of mine, I discussed the phenomenon called “endosymbiosis” by Dr. Lynn Margulis, who suggested a cellular evolution based on ‘cooperation’ rather than simple ‘competition’ between viral or bacterial infection and host cell. This co-evolutionary behaviour runs counter to the traditional route of natural selection and contradicts the ruthless selfishness of Darwinian thinking. Such an evolving relationship between two different species of life, living together in a very close affinity of mutual benefit is common in nature.
Let's take a look at the simple virus: the ecological "home" of the virus is the genome of any potential host and scientists have remained baffled by the overwhelming evidence for ‘accomodation’; a virus initially very aggressive, may exhibit less aggression toward an evolution of partnership.
Co-evolution was first proposed by Ehrlich and Raven in 1964 to explain the parallel evolution of butterflies and their host plants. Virologist, Frank Ryan calls it “a wonderful marriage in nature—a partnership in which the definition of predator and prey blurs, until it seems to metamorphose to something altogether different.” Co-evolution is now an established theme in the biology of virus-host relationships. Relationships span from the complex interaction between arboviruses and their vector mosquitoes to the one between the malaria-causing plasmodium and humans or the hantavirus and the deer mouse.
Ryan states that “today...every monkey, baboon, chimpanzee and gorilla is carrying at least ten different species of symbiotic viruses.”
“Why,” asks Dr. Frank Ryan, “is co-evolution [and its partner, symbiosis] such a common pattern in nature?” Ryan coined the term “genomic intelligence” to explain the form of intelligence exerted by viruses and the capacity of the genome to be both receptive and responsive to nature. It involves an incredible interaction between the genetic template and nature that governs even viruses. Symbiosis and natural selection need not be viewed as mutually contradictory. Russian biologists, Andrei Famintsyn and Konstantine Merezhkovskii invented the term “symbiogenesis” to explain the fantastic synthesis of new living organisms from symbiotic unions. Citing the evolution of mitochondria and the chloroplast within a primitive host cell to form the more complex eukaryotic cell (as originally theorized by Lynn Margulis), Ryan noted that “it would be hard to imagine how the step by step gradualism of natural selection could have resulted in this brazenly passionate intercourse of life!”
In his book, “Virus X” Dr. Frank Ryan coined the term “aggressive symbiont” to explain a common form of symbiosis where one or both symbiotic partners demonstrates an aggressive and potentially harmful effect on the other’s competitor or potential predator. Examples abound, but a few are worth mentioning here. In the South American forests, a species of acacia tree that produces a waxy berry of protein at the ends of their leaves that provides nourishment for the growing infants of the ant colony residing in the tree. The ants, in turn not only keep the foliage clear of herbivores and preying insects through a stinging assault, but they make hunting forays into the wilderness of the tree, destroying the growing shoots of potential rivals to the acacia. Viruses commonly form “aggressive symbiotic” relationships with their hosts, one example of which is the herpes-B virus, Herpesvirus saimiri, and the squirrel monkey (the virus induces cancer in the competing marmoset monkey). Ryan suggests that the Ebola and hantavirus outbreaks follow a similar pattern of “aggressive symbiosis”.
The historian, William H. McNeill, suggested that a form of “aggressive symbiosis” played a key role in the history of human civilization. “At every level of organization—molecular, cellular, organismic, and social—one confronts equilibrium [symbiotic] patterns. Within such equilibria, any alteration from ‘outside’ tends to provoke compensatory changes [aggressive symbiosis] throughout the system to minimize overall upheaval.” One of a legacy of examples of aggressive symbiosis in history includes smallpox: presumably in the process of symbiotic adaptation through co-evolution with the Europeans, they introduced it to the Aztecs with devastating results. Other examples include measles, malaria, and yellow fever.
Well, this puts a whole new twist on the concept of encroachment and development, doesn't it?...
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miércoles, 28 de abril de 2010
lunes, 26 de abril de 2010
Los enemigos invisibles de la cueva de Altamira
Excelente artículo en donde se observan las interacciones de los microorganismos en las cuevas, consideradas por algunos como el sexto continente debido a sus peculiares características.
Publicado en Público
Las visitas continuadas a la Capilla Sixtina del arte rupestre son la peor amenaza para su conservación, ya que provocan la aparición de microorganismos dañinos para las pinturasVota
JESÚS MIGUEL MARCOS - MADRID - 26/04/2010 08:35
La salud de la cueva de Altamira es frágil y requiere cuidados intensivos. Así lo confirman las conclusiones del informe elaborado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), al que ha tenido acceso Público, después de un trabajo de análisis y monitorización de dos años.
En este tiempo, las medidas correctoras aplicadas por los técnicos del CSIC han logrado estabilizar lo máximo posible el ambiente en el interior de la cueva. Sin embargo, ante la reunión del Patronato de Altamira que el 8 de junio decidirá si se abre o se mantiene cerrada, los investigadores advierten del peligro de la "entrada continuada de visitantes" y recomiendan seguir con la "actual línea de actuación", lo que supondría mantenerla cerrada. El Ministerio de Cultura ha asegurado que respetará el informe del CSIC en el patronato, pero el Gobierno de Cantabria insiste en que su objetivo es abrir la cueva.
El próximo 8 de junio el Patronato de Altamira decide si se reabre la cueva
Los enemigos de las pinturas de Altamira, considerada la Capilla Sixtina del arte rupestre, son muchos, variados y principalmente microscópicos. Se trata de microorganismos imperceptibles, pero cuya acción ha sido inequívocamente visible en forma de manchas verdes sobre los famosos bisontes de la Sala de Polícromos.
Podría ser peor: las pinturas de la cueva de Lascaux (Francia) sufrieron la invasión de hongos negros y otros organismos que atacaron directamente el sustrato, es decir, la roca donde están las pinturas. Precisamente, la última investigación del CSIC encontró una colonización por hongos en estado latente no descubierta previamente en la gruta cántabra.
Altamira es una cueva especialmente sensible: presenta una diversidad microbiana muy elevada, donde incluso "los sustratos aparentemente no colonizados por microorganismos muestran un alto grado de actividad microbiana", explica el informe del CSIC. Según este estudio, el objetivo es que las poblaciones de microbios se mantengan "en fase de adaptación o pasen de la fase de crecimiento exponencial a una estacionaria".
El último estudio del CSIC descubrió una colonización de hongos nueva
Pero hay varios factores que podrían imposibilitar llegar a esta meta y casi todos están relacionados con la entrada de visitantes en el lugar, lo que no se produce desde que se cerrara al público en el año 2002. De decidirse la apertura, en Altamira entrarían personas... y algo más.
Las esporas
Las personas somos vehículos de esporas, portadores de sustancias biológicas que pueden quedarse dentro de la cueva y reproducirse. "Estas esporas pueden estar latentes durante décadas e incluso cientos de años, hasta que encuentran un medio ideal y empiezan a actuar", explica José María Calaforra, profesor de Geología de la Universidad de Almería.
Durante el último estudio del CSIC, los investigadores se vieron obligados a suspender las visitas experimentales que había solicitado la Dirección General de Bellas Artes "para evitar la dispersión de esporas asociado a las entradas", que podría acelerar "la rápida pauta de crecimiento de los hongos".
La temperatura
Los movimientos de los visitantes en el interior de la gruta generan cambios de temperatura, lo que afecta considerablemente a la estabilidad ambiental, ya que en un lugar que está bajo tierra las variaciones de calor y frío son mínimas. "Si hay un incremento de la temperatura, se evapora agua de las superficies; si disminuye, esta agua se deposita. Con lo cual los organismos tienen más agua para reproducirse más rápido, sobre todo si hay luz", indica Mariona Hernández-Mariné, farmacéutica de la Universidad de Barcelona que participó en la última investigación del CSIC.
Para reducir la entrada de partículas y el efecto del intercambio energético, se ha instalado un segundo cierre que ha ayudado a conservar el clima de la cueva. "Se ha logrado una menor tasa de intercambio con el exterior y una dinámica físico-química con menos oscilaciones y con pautas más próximas a las naturales que hace diez años", reza el informe del CSIC.
La humedad
La respiración y el sudor de los visitantes provocan variaciones en la humedad de la cueva, que se almacena sobre las paredes. En el año 2002, esto originó unas pátinas verdes formadas por microalgas y cianobacterias. En ese momento fue cuando se determinó el cierre de la cueva, porque estos microorganismos podrían dar lugar a escenarios todavía más peligrosos. "Las microalgas y cianobacterias son biomasa, es decir, comida para otros organismos. Sobre estas zonas crecen otros microorganismos que dañan más las pinturas que las propias microalgas", explica Hernández-Mariné.
Respiración y luz
El anhídrido carbónico de la respiración es especialmente nocivo, ya que las microalgas lo utilizan para realizar la fotosíntesis. Este proceso no sólo aumenta la humedad en la Sala de Polícromos, sino que produce nueva materia orgánica que puede resultar más peligrosa que las propias microalgas.
Los otros dos componentes que necesitan las microalgas para realizar la fotosíntesis son nutrientes y luz. Este fue el motivo de que en 2006 se retirara el tendido de iluminación eléctrica en el interior de la gruta. "En este sentido, cabe la posibilidad de no iluminar con luz blanca. Se puede iluminar con luces frías o con menores longitudes de onda", señala Hernández-Mariné.
Nutrientes del exterior
"Hay una manía de ajardinar las zonas alrededor de las cuevas, para que quede bonito, lo que es perjudicial para el interior. Si tienes una cueva subterránea y no quieres que haya nutrientes, no puedes regar por encima", detalla la profesora Hernández-Mariné.
Desde 2005 se ha controlado la vegetación en el exterior de Altamira (principalmente sobre la cueva, donde hay nutrientes generados por la ganadería), evitando los riegos con nitrógeno y fósforo, gracias a lo cual se ha conseguido "un descenso de los compuestos nitrogenados en el agua de infiltración", concluye el CSIC.
Publicado en Público
Las visitas continuadas a la Capilla Sixtina del arte rupestre son la peor amenaza para su conservación, ya que provocan la aparición de microorganismos dañinos para las pinturasVota
JESÚS MIGUEL MARCOS - MADRID - 26/04/2010 08:35
La salud de la cueva de Altamira es frágil y requiere cuidados intensivos. Así lo confirman las conclusiones del informe elaborado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), al que ha tenido acceso Público, después de un trabajo de análisis y monitorización de dos años.
En este tiempo, las medidas correctoras aplicadas por los técnicos del CSIC han logrado estabilizar lo máximo posible el ambiente en el interior de la cueva. Sin embargo, ante la reunión del Patronato de Altamira que el 8 de junio decidirá si se abre o se mantiene cerrada, los investigadores advierten del peligro de la "entrada continuada de visitantes" y recomiendan seguir con la "actual línea de actuación", lo que supondría mantenerla cerrada. El Ministerio de Cultura ha asegurado que respetará el informe del CSIC en el patronato, pero el Gobierno de Cantabria insiste en que su objetivo es abrir la cueva.
El próximo 8 de junio el Patronato de Altamira decide si se reabre la cueva
Los enemigos de las pinturas de Altamira, considerada la Capilla Sixtina del arte rupestre, son muchos, variados y principalmente microscópicos. Se trata de microorganismos imperceptibles, pero cuya acción ha sido inequívocamente visible en forma de manchas verdes sobre los famosos bisontes de la Sala de Polícromos.
Podría ser peor: las pinturas de la cueva de Lascaux (Francia) sufrieron la invasión de hongos negros y otros organismos que atacaron directamente el sustrato, es decir, la roca donde están las pinturas. Precisamente, la última investigación del CSIC encontró una colonización por hongos en estado latente no descubierta previamente en la gruta cántabra.
Altamira es una cueva especialmente sensible: presenta una diversidad microbiana muy elevada, donde incluso "los sustratos aparentemente no colonizados por microorganismos muestran un alto grado de actividad microbiana", explica el informe del CSIC. Según este estudio, el objetivo es que las poblaciones de microbios se mantengan "en fase de adaptación o pasen de la fase de crecimiento exponencial a una estacionaria".
El último estudio del CSIC descubrió una colonización de hongos nueva
Pero hay varios factores que podrían imposibilitar llegar a esta meta y casi todos están relacionados con la entrada de visitantes en el lugar, lo que no se produce desde que se cerrara al público en el año 2002. De decidirse la apertura, en Altamira entrarían personas... y algo más.
Las esporas
Las personas somos vehículos de esporas, portadores de sustancias biológicas que pueden quedarse dentro de la cueva y reproducirse. "Estas esporas pueden estar latentes durante décadas e incluso cientos de años, hasta que encuentran un medio ideal y empiezan a actuar", explica José María Calaforra, profesor de Geología de la Universidad de Almería.
Durante el último estudio del CSIC, los investigadores se vieron obligados a suspender las visitas experimentales que había solicitado la Dirección General de Bellas Artes "para evitar la dispersión de esporas asociado a las entradas", que podría acelerar "la rápida pauta de crecimiento de los hongos".
La temperatura
Los movimientos de los visitantes en el interior de la gruta generan cambios de temperatura, lo que afecta considerablemente a la estabilidad ambiental, ya que en un lugar que está bajo tierra las variaciones de calor y frío son mínimas. "Si hay un incremento de la temperatura, se evapora agua de las superficies; si disminuye, esta agua se deposita. Con lo cual los organismos tienen más agua para reproducirse más rápido, sobre todo si hay luz", indica Mariona Hernández-Mariné, farmacéutica de la Universidad de Barcelona que participó en la última investigación del CSIC.
Para reducir la entrada de partículas y el efecto del intercambio energético, se ha instalado un segundo cierre que ha ayudado a conservar el clima de la cueva. "Se ha logrado una menor tasa de intercambio con el exterior y una dinámica físico-química con menos oscilaciones y con pautas más próximas a las naturales que hace diez años", reza el informe del CSIC.
La humedad
La respiración y el sudor de los visitantes provocan variaciones en la humedad de la cueva, que se almacena sobre las paredes. En el año 2002, esto originó unas pátinas verdes formadas por microalgas y cianobacterias. En ese momento fue cuando se determinó el cierre de la cueva, porque estos microorganismos podrían dar lugar a escenarios todavía más peligrosos. "Las microalgas y cianobacterias son biomasa, es decir, comida para otros organismos. Sobre estas zonas crecen otros microorganismos que dañan más las pinturas que las propias microalgas", explica Hernández-Mariné.
Respiración y luz
El anhídrido carbónico de la respiración es especialmente nocivo, ya que las microalgas lo utilizan para realizar la fotosíntesis. Este proceso no sólo aumenta la humedad en la Sala de Polícromos, sino que produce nueva materia orgánica que puede resultar más peligrosa que las propias microalgas.
Los otros dos componentes que necesitan las microalgas para realizar la fotosíntesis son nutrientes y luz. Este fue el motivo de que en 2006 se retirara el tendido de iluminación eléctrica en el interior de la gruta. "En este sentido, cabe la posibilidad de no iluminar con luz blanca. Se puede iluminar con luces frías o con menores longitudes de onda", señala Hernández-Mariné.
Nutrientes del exterior
"Hay una manía de ajardinar las zonas alrededor de las cuevas, para que quede bonito, lo que es perjudicial para el interior. Si tienes una cueva subterránea y no quieres que haya nutrientes, no puedes regar por encima", detalla la profesora Hernández-Mariné.
Desde 2005 se ha controlado la vegetación en el exterior de Altamira (principalmente sobre la cueva, donde hay nutrientes generados por la ganadería), evitando los riegos con nitrógeno y fósforo, gracias a lo cual se ha conseguido "un descenso de los compuestos nitrogenados en el agua de infiltración", concluye el CSIC.
lunes, 19 de abril de 2010
España necesita un Madrid-Barça universitario
Publicado en EL PAÍS - Opinión - 19-04-2010
Este es quizás el mejor artículo que haya leído sobre el tema.
ÁNGEL CABRERA
Es preocupante que España no tenga ninguna universidad entre la élite científica y tecnológica mundial. No es una mera cuestión de orgullo patrio. Nos jugamos buena parte de nuestra prosperidad económica. Una economía avanzada como la española, con rentas altas similares a las de los países más desarrollados y con uno de los mayores niveles de bienestar del mundo, sólo puede seguir creciendo a través de la innovación.
La Universidad es uno de los motores de innovación más importantes y por eso es fundamental que esté a la altura.
Según el Academic Ranking of World Universities (realizado en Shanghai), ninguna universidad española se sitúa entre las 100 primeras en términos de investigación y sólo una (Barcelona) se encuentra entre las 200 mejores. Ninguna universidad española sobresale en ciencias naturales, ingeniería, agricultura, o ciencias sociales. Sólo en medicina, una universidad española (Barcelona), aparece entre las 100 primeras. En el ranking elaborado en España por el CSIC tampoco aparece ninguna universidad española entre las 100 primeras, y solo dos (Complutense y Politécnica de Madrid) entre las 200 mejores.
Curiosamente en el fútbol, donde nos jugamos bastante menos, nos va mucho mejor. España tiene 11 de los 100 mejores clubes de todos los tiempos, incluidos dos (Barcelona y Real Madrid) entre los 10 primeros. Los clubes españoles han ganado la Copa de Europa más veces que los de ningún otro país. Los mejores jugadores del mundo aspiran a jugar en España, donde más de la tercera parte de los jugadores de primera división son extranjeros. Y esta inyección de talento internacional ha contribuido a elevar el doméstico al mejor nivel de la historia. Según la FIFA, la selección española es hoy la mejor del mundo.
El éxito del fútbol español no es casual, sino que es el resultado de una combinación de enormes recursos financieros, concentración de talento, dinámica competitiva y estructuras efectivas de gobernanza y rendición de cuentas. La presión de los socios de un equipo como el Real Madrid tras ser eliminado de la Champions y derrotado en casa por su eterno rival, se hace sentir de manera casi inmediata sobre la junta directiva, como lo es la de la junta directiva sobre el entrenador y la del entrenador sobre la plantilla. Si usted fuera presidente del Real Madrid, estaría pensando ya en sustituir al entrenador y en reforzar la plantilla, por la cuenta que le traería.
Nada parecido ocurre en la Universidad. Si usted fuera rector de cualquiera de las 50 universidades públicas españolas, no sentiría prácticamente presión de los contribuyentes (los "socios" que pagan sus facturas), ya que éstos no tienen ninguna influencia, directa o indirecta, en su nombramiento. Por ley son los miembros de la plantilla quienes eligen al rector.
Si por cualquier motivación personal usted decidiera que los resultados actuales no eran aceptables, no tendría la capacidad de sustituir a sus decanos o directores de departamento ya que ellos también son elegidos por la plantilla. De hecho, se puede dar el caso de que sus decanos tengan ideas diametralmente opuestas sobre las prioridades de la Universidad.
Si por intervención divina los decanos estuvieran de acuerdo en la necesidad de mejorar dramáticamente la producción científica, poco podrían hacer ellos para reforzar la plantilla y fichar alguna estrella de fuera, ya que la ley les deja muy poco margen de maniobra para atraer y compensar a nuevos profesores.
Si a pesar de todo esto, usted consiguiera milagrosamente mejorar los resultados, sería muy posible que perdiera su cargo en las próximas elecciones porque seguramente habría herido las sensibilidades de una buena parte de la plantilla con tanto cambio y exigencia.
El problema de la Universidad en España no es sólo de financiación, sino de gobernanza y rendición de cuentas. Los rectores necesitan mayor autoridad (especialmente para contratar profesores dentro y fuera de España y compensarlos competitivamente), pero al mismo tiempo deben ser nombrados y evaluados por consejos independientes. La investigación necesita, es cierto, mayor inversión pública, pero los fondos han de ser distributivos imparcial y competitivamente, en base exclusiva a méritos. Las universidades tienen que involucrarse más en los procesos de innovación empresarial, pero a su vez han de ser capaces de beneficiarse del valor comercial de sus descubrimientos.
Estos cambios pueden ser introducidos a través de una reforma a fondo de la ley de universidades o introduciendo nuevos modelos de Universidad de financiación mixta y gobernanza independiente, o incluso abriendo el mercado a universidades extranjeras que pongan mayor presión competitiva sobre el sistema. Sea como sea, aumentar la competitividad investigadora de la Universidad española debe ser una prioridad estratégica, no ya para salir de la crisis, sino para sentar las bases de una economía innovadora y competitiva a medio y largo plazo.
No todas las universidades van a alcanzar la élite mundial, pero si un par de ellas lo consiguen, los resultados serán beneficiosos para todo el sistema universitario y para el conjunto de la sociedad. España necesita urgentemente un Madrid-Barça, de universidades.
Este es quizás el mejor artículo que haya leído sobre el tema.
ÁNGEL CABRERA
Es preocupante que España no tenga ninguna universidad entre la élite científica y tecnológica mundial. No es una mera cuestión de orgullo patrio. Nos jugamos buena parte de nuestra prosperidad económica. Una economía avanzada como la española, con rentas altas similares a las de los países más desarrollados y con uno de los mayores niveles de bienestar del mundo, sólo puede seguir creciendo a través de la innovación.
La Universidad es uno de los motores de innovación más importantes y por eso es fundamental que esté a la altura.
Según el Academic Ranking of World Universities (realizado en Shanghai), ninguna universidad española se sitúa entre las 100 primeras en términos de investigación y sólo una (Barcelona) se encuentra entre las 200 mejores. Ninguna universidad española sobresale en ciencias naturales, ingeniería, agricultura, o ciencias sociales. Sólo en medicina, una universidad española (Barcelona), aparece entre las 100 primeras. En el ranking elaborado en España por el CSIC tampoco aparece ninguna universidad española entre las 100 primeras, y solo dos (Complutense y Politécnica de Madrid) entre las 200 mejores.
Curiosamente en el fútbol, donde nos jugamos bastante menos, nos va mucho mejor. España tiene 11 de los 100 mejores clubes de todos los tiempos, incluidos dos (Barcelona y Real Madrid) entre los 10 primeros. Los clubes españoles han ganado la Copa de Europa más veces que los de ningún otro país. Los mejores jugadores del mundo aspiran a jugar en España, donde más de la tercera parte de los jugadores de primera división son extranjeros. Y esta inyección de talento internacional ha contribuido a elevar el doméstico al mejor nivel de la historia. Según la FIFA, la selección española es hoy la mejor del mundo.
El éxito del fútbol español no es casual, sino que es el resultado de una combinación de enormes recursos financieros, concentración de talento, dinámica competitiva y estructuras efectivas de gobernanza y rendición de cuentas. La presión de los socios de un equipo como el Real Madrid tras ser eliminado de la Champions y derrotado en casa por su eterno rival, se hace sentir de manera casi inmediata sobre la junta directiva, como lo es la de la junta directiva sobre el entrenador y la del entrenador sobre la plantilla. Si usted fuera presidente del Real Madrid, estaría pensando ya en sustituir al entrenador y en reforzar la plantilla, por la cuenta que le traería.
Nada parecido ocurre en la Universidad. Si usted fuera rector de cualquiera de las 50 universidades públicas españolas, no sentiría prácticamente presión de los contribuyentes (los "socios" que pagan sus facturas), ya que éstos no tienen ninguna influencia, directa o indirecta, en su nombramiento. Por ley son los miembros de la plantilla quienes eligen al rector.
Si por cualquier motivación personal usted decidiera que los resultados actuales no eran aceptables, no tendría la capacidad de sustituir a sus decanos o directores de departamento ya que ellos también son elegidos por la plantilla. De hecho, se puede dar el caso de que sus decanos tengan ideas diametralmente opuestas sobre las prioridades de la Universidad.
Si por intervención divina los decanos estuvieran de acuerdo en la necesidad de mejorar dramáticamente la producción científica, poco podrían hacer ellos para reforzar la plantilla y fichar alguna estrella de fuera, ya que la ley les deja muy poco margen de maniobra para atraer y compensar a nuevos profesores.
Si a pesar de todo esto, usted consiguiera milagrosamente mejorar los resultados, sería muy posible que perdiera su cargo en las próximas elecciones porque seguramente habría herido las sensibilidades de una buena parte de la plantilla con tanto cambio y exigencia.
El problema de la Universidad en España no es sólo de financiación, sino de gobernanza y rendición de cuentas. Los rectores necesitan mayor autoridad (especialmente para contratar profesores dentro y fuera de España y compensarlos competitivamente), pero al mismo tiempo deben ser nombrados y evaluados por consejos independientes. La investigación necesita, es cierto, mayor inversión pública, pero los fondos han de ser distributivos imparcial y competitivamente, en base exclusiva a méritos. Las universidades tienen que involucrarse más en los procesos de innovación empresarial, pero a su vez han de ser capaces de beneficiarse del valor comercial de sus descubrimientos.
Estos cambios pueden ser introducidos a través de una reforma a fondo de la ley de universidades o introduciendo nuevos modelos de Universidad de financiación mixta y gobernanza independiente, o incluso abriendo el mercado a universidades extranjeras que pongan mayor presión competitiva sobre el sistema. Sea como sea, aumentar la competitividad investigadora de la Universidad española debe ser una prioridad estratégica, no ya para salir de la crisis, sino para sentar las bases de una economía innovadora y competitiva a medio y largo plazo.
No todas las universidades van a alcanzar la élite mundial, pero si un par de ellas lo consiguen, los resultados serán beneficiosos para todo el sistema universitario y para el conjunto de la sociedad. España necesita urgentemente un Madrid-Barça, de universidades.
viernes, 16 de abril de 2010
IDSA Releases Hit List of Dangerous Bugs
WASHINGTON, DC, MARCH 1, 2006--The Infectious Diseases Society of America (IDSA) today renewed its call for federal legislation to galvanize the pharmaceutical and biotechnology industries into fighting the growing epidemic of antimicrobial resistance, releasing a “Hit List” of the six top-priority dangerous, drug-resistant microbes. These six “superbugs” are especially dangerous because few or no new drugs are being developed to treat them.
The Hit List was drawn from an article in the March 1 issue of Clinical Infectious Diseases.
“These are life-threatening drug-resistant infections, and we’re seeing them every day,” says IDSA President Martin J. Blaser, MD. “What is worse is that our ammunition is running out and there are no reinforcements in sight.”
Congress has not passed the comprehensive legislation needed to stimulate antimicrobial research and development that IDSA called for in its July 2004 report, Bad Bugs, No Drugs: As Antibiotic Discovery Stagnates…A Public Health Crisis Brews.
The new article and Hit List, written by the authors of the Bad Bugs report, re-focus attention on the issue by identifying what experts in the field believe are “the microbes where the gap between public health threat and drug development are the greatest,” says John G. Bartlett, MD, chair of IDSA’s Antimicrobial Availability Task Force and one of authors of the article. “These are the germs we see in hospitals every day that we don’t have good treatments for.”
“These organisms are a serious threat to public health, but it’s much more profitable for a pharmaceutical company to make a cholesterol drug that you take for a lifetime than an antibiotic you take for a week,” says George H. Talbot, MD, lead author of the article. “IDSA is concerned that market forces are not going to solve this problem,” he adds.
IDSA’s Bad Bugs, No Drugs report showed a steady 20-year decline in the number of new FDA-approved antimicrobials and total withdrawal from the field by many major pharmaceutical companies.
The authors of the report revisited the issue and found a few more drugs in the pipeline. “But the germs that are the biggest problems are not the ones getting the most attention from the major pharmaceutical companies,” Dr. Talbot says. “Action is needed — and soon,” he adds, “because it takes years for a new drug to go from the lab to the medicine cabinet.”
IDSA is urging Congress to pass comprehensive legislation to encourage the pharmaceutical industry to re-enter this essential field. Congress should establish a commission to set antimicrobial discovery priorities. Companies that develop novel antimicrobials should be rewarded with market exclusivity rights. And research, development, and manufacturing should be encouraged through tax credits.
“Investments in stimulating antimicrobials research and development will also pay dividends in other areas of infectious diseases preparedness, including biodefense,” Dr. Bartlett notes. “It’s urgent that Congress make this investment now.”
THE HIT LIST:
Methicillin-resistant Staphylococcus aureus (MRSA): MRSA infections constitute the majority of health care-associated infections, increasing lengths of hospital stay, severity of illness, deaths, and costs. While these infections used to be limited primarily to hospitals, they are becoming increasingly common in communities nationwide, especially where groups of people are in close quarters, including military facilities, sports teams, and prisons. The number of infected children jumped 28 percent between 2001 and 2004. Several treatment options are available for MRSA, but many have harsh side effects, and resistance is growing to each of them. Most of the drugs in development must be given by injection—a painful, inconvenient, and expensive route. Drugs that can be taken by mouth are desperately needed.
Escherichia coli and Klebsiella species: These bacteria are major causes of urinary tract, gastrointestinal tract, and wound infections. They are becoming resistant to a growing number of antibiotic classes at the same time as the frequency of outbreaks is increasing. Failure to treat with the appropriate antibiotics during a recently documented K. pneumoniae outbreak increased the mortality rate from 14 percent to 64 percent. Both microbes tend to rapidly evolve resistance to new drugs, but few are available or under development. New therapies are badly needed.
Acinetobacter baumannii: A. baumannii "is a prime example of a mismatch between unmet medical need and the current antimicrobial research and development pipeline," according to the Clinical Infectious Diseases article. The bacterium is a growing cause of hospital-acquired pneumonia. Mortality rates range from 20 to 50 percent. The number and hardiness of drug-resistant strains are growing. Soldiers are also returning from Iraq and Afghanistan with cases of highly resistant Acinetobacter wound infections. Doctors have been forced to resort to an old drug, colistin, which had previously been abandoned as too toxic. But only one new drug is on the horizon to treat Acinetobacter infections, and it is considered to be too toxic for children.
Aspergillus: This fungal infection is a growing problem among immunocompromised patients such as cancer patients, organ transplant recipients, and people with HIV, and the number of infections is expected to keep increasing as the number of immunocompromised patients increases. Existing drugs are toxic or interact with other drugs. Resistance to them is growing. Even with the best, newly approved antifungals, death rates from Aspergillus infection are 50-60 percent. Few new antifungal drugs are in the pipeline, and their ability to combat Aspergillus infections is uncertain because drug companies are choosing to conduct clinical trials on other, easier-to-study fungal infections.
Vancomycin-resistant Enterococcus faecium (VRE): VRE is a major cause of bloodstream infections, infections of the heart, meningitis, and intra-abdominal infections. A recent survey of 494 U.S. hospitals found a VRE rate of 10 percent of across all patient groups. Rates are as high as 70 percent among high-risk groups. While drugs are available to treat VRE, they have serious shortcomings. Current drugs do not rapidly kill VRE, and only one is available in an oral formulation.
Pseudomonas aeruginosa: This germ causes severe infection that can be life-threatening, particularly in immunocompromised patients. Rates of P. aeruginosa hospital-acquired pneumonia have nearly doubled, from 9.6 percent in 1975 to 18.1 percent in 2003. Infections following surgery and urinary tract infections from P. aeruginosa have doubled. The germ poses a particular threat to children with cystic fibrosis (CF). Antibiotics can keep CF patients alive for decades, but eventually highly resistant germs take over. With almost no alternatives left, these patients die unless they receive lung transplants. No novel drug candidates have entered human trials. New ideas, research, and products are desperately needed.
The Hit List was drawn from an article in the March 1 issue of Clinical Infectious Diseases.
“These are life-threatening drug-resistant infections, and we’re seeing them every day,” says IDSA President Martin J. Blaser, MD. “What is worse is that our ammunition is running out and there are no reinforcements in sight.”
Congress has not passed the comprehensive legislation needed to stimulate antimicrobial research and development that IDSA called for in its July 2004 report, Bad Bugs, No Drugs: As Antibiotic Discovery Stagnates…A Public Health Crisis Brews.
The new article and Hit List, written by the authors of the Bad Bugs report, re-focus attention on the issue by identifying what experts in the field believe are “the microbes where the gap between public health threat and drug development are the greatest,” says John G. Bartlett, MD, chair of IDSA’s Antimicrobial Availability Task Force and one of authors of the article. “These are the germs we see in hospitals every day that we don’t have good treatments for.”
“These organisms are a serious threat to public health, but it’s much more profitable for a pharmaceutical company to make a cholesterol drug that you take for a lifetime than an antibiotic you take for a week,” says George H. Talbot, MD, lead author of the article. “IDSA is concerned that market forces are not going to solve this problem,” he adds.
IDSA’s Bad Bugs, No Drugs report showed a steady 20-year decline in the number of new FDA-approved antimicrobials and total withdrawal from the field by many major pharmaceutical companies.
The authors of the report revisited the issue and found a few more drugs in the pipeline. “But the germs that are the biggest problems are not the ones getting the most attention from the major pharmaceutical companies,” Dr. Talbot says. “Action is needed — and soon,” he adds, “because it takes years for a new drug to go from the lab to the medicine cabinet.”
IDSA is urging Congress to pass comprehensive legislation to encourage the pharmaceutical industry to re-enter this essential field. Congress should establish a commission to set antimicrobial discovery priorities. Companies that develop novel antimicrobials should be rewarded with market exclusivity rights. And research, development, and manufacturing should be encouraged through tax credits.
“Investments in stimulating antimicrobials research and development will also pay dividends in other areas of infectious diseases preparedness, including biodefense,” Dr. Bartlett notes. “It’s urgent that Congress make this investment now.”
THE HIT LIST:
Methicillin-resistant Staphylococcus aureus (MRSA): MRSA infections constitute the majority of health care-associated infections, increasing lengths of hospital stay, severity of illness, deaths, and costs. While these infections used to be limited primarily to hospitals, they are becoming increasingly common in communities nationwide, especially where groups of people are in close quarters, including military facilities, sports teams, and prisons. The number of infected children jumped 28 percent between 2001 and 2004. Several treatment options are available for MRSA, but many have harsh side effects, and resistance is growing to each of them. Most of the drugs in development must be given by injection—a painful, inconvenient, and expensive route. Drugs that can be taken by mouth are desperately needed.
Escherichia coli and Klebsiella species: These bacteria are major causes of urinary tract, gastrointestinal tract, and wound infections. They are becoming resistant to a growing number of antibiotic classes at the same time as the frequency of outbreaks is increasing. Failure to treat with the appropriate antibiotics during a recently documented K. pneumoniae outbreak increased the mortality rate from 14 percent to 64 percent. Both microbes tend to rapidly evolve resistance to new drugs, but few are available or under development. New therapies are badly needed.
Acinetobacter baumannii: A. baumannii "is a prime example of a mismatch between unmet medical need and the current antimicrobial research and development pipeline," according to the Clinical Infectious Diseases article. The bacterium is a growing cause of hospital-acquired pneumonia. Mortality rates range from 20 to 50 percent. The number and hardiness of drug-resistant strains are growing. Soldiers are also returning from Iraq and Afghanistan with cases of highly resistant Acinetobacter wound infections. Doctors have been forced to resort to an old drug, colistin, which had previously been abandoned as too toxic. But only one new drug is on the horizon to treat Acinetobacter infections, and it is considered to be too toxic for children.
Aspergillus: This fungal infection is a growing problem among immunocompromised patients such as cancer patients, organ transplant recipients, and people with HIV, and the number of infections is expected to keep increasing as the number of immunocompromised patients increases. Existing drugs are toxic or interact with other drugs. Resistance to them is growing. Even with the best, newly approved antifungals, death rates from Aspergillus infection are 50-60 percent. Few new antifungal drugs are in the pipeline, and their ability to combat Aspergillus infections is uncertain because drug companies are choosing to conduct clinical trials on other, easier-to-study fungal infections.
Vancomycin-resistant Enterococcus faecium (VRE): VRE is a major cause of bloodstream infections, infections of the heart, meningitis, and intra-abdominal infections. A recent survey of 494 U.S. hospitals found a VRE rate of 10 percent of across all patient groups. Rates are as high as 70 percent among high-risk groups. While drugs are available to treat VRE, they have serious shortcomings. Current drugs do not rapidly kill VRE, and only one is available in an oral formulation.
Pseudomonas aeruginosa: This germ causes severe infection that can be life-threatening, particularly in immunocompromised patients. Rates of P. aeruginosa hospital-acquired pneumonia have nearly doubled, from 9.6 percent in 1975 to 18.1 percent in 2003. Infections following surgery and urinary tract infections from P. aeruginosa have doubled. The germ poses a particular threat to children with cystic fibrosis (CF). Antibiotics can keep CF patients alive for decades, but eventually highly resistant germs take over. With almost no alternatives left, these patients die unless they receive lung transplants. No novel drug candidates have entered human trials. New ideas, research, and products are desperately needed.
Actimel ayuda a mantener las defensas de tus hijos, hecho científicamente probado
Danone cambia su política y anuncia una modificación de la publicidad de los mencionados productos a nivel europeo, dejando de elogiar los beneficios para la salud.
Aunque parezca difícil de creer y tras años de publicidad proclamando las virtudes saludables de sus productos, la compañía Danone da la espalda a Actimel y Activia. Danone ha anunciado que dejará de elogiar y alabar los beneficios para la salud de estos productos y lo hace ante la posibilidad de que la EFSA (Agencia Europea de Salud Alimentaria) invalide los argumentos y estudios presentados por Danone ante este organismo.
De momento, Danone da la espalda a Actimel y Activia y deja de luchar por reivindicar sus supuestas virtudes, argumentando la falta de transparencia de la EFSA sobre los requisitos para la solicitud de la connotación saludable y beneficiosa para el organismo. Si no se puede demostrar… hay que saber perder. Puedes conocer más detalles de la noticia a través de la publicación digital The Wall Street Journal.
Aunque parezca difícil de creer y tras años de publicidad proclamando las virtudes saludables de sus productos, la compañía Danone da la espalda a Actimel y Activia. Danone ha anunciado que dejará de elogiar y alabar los beneficios para la salud de estos productos y lo hace ante la posibilidad de que la EFSA (Agencia Europea de Salud Alimentaria) invalide los argumentos y estudios presentados por Danone ante este organismo.
De momento, Danone da la espalda a Actimel y Activia y deja de luchar por reivindicar sus supuestas virtudes, argumentando la falta de transparencia de la EFSA sobre los requisitos para la solicitud de la connotación saludable y beneficiosa para el organismo. Si no se puede demostrar… hay que saber perder. Puedes conocer más detalles de la noticia a través de la publicación digital The Wall Street Journal.
Un virus vegetal puede contagiar a humanos
Se trataría del primer caso de transmisión de un pátogeno de plantas a personas
Un equipo de científicos franceses cree tener pruebas de los primeros casos detectados de contagio de un virus vegetal, el del moteado suave del pimiento (PMMV), a seres humanos. De confirmarse sus resultados, podrían echar abajo uno de los paradigmas básicos de la microbiología, que dibuja una frontera infranqueable entre los virus del mundo vegetal y los del animal. También podría cuestionar el procesado industrial del pimiento: la mitad de los productos analizados tenía el virus.
Los investigadores, expertos en enfermedades infecciosas y virología del Centro Nacional de Investigación Científica (el CSIC galo), analizaron 565 muestras de heces208 de ellas procedentes de niños de residentes en Marsella y su zona de influencia en busca de la presencia del PMMV para contrastar indicios hallados por otro estudio anterior de científicos chinos. Encontraron que, en 22 adultos (el 7,2%), las deposiciones dieron positivo, mientras que sólo un niño presentó trazas del virus, según han publicado en PLoS ONE.
Estos resultados confirman que el tracto humano, además de la flora bacteriana, contiene virus de origen vegetal. Pero los investigadores querían averiguar el origen de estos patógenos y su impacto en la salud humana. Hasta ahora, la ciencia ha sostenido que, aunque se consuma un producto vegetal enfermo, este no contagia al animal o ser humano.
Con la ayuda de los hospitales de la zona y la facultad de Medicina de la Universidad del Mediterráneo, estudiaron más de cerca a 18 de los 22 adultos cuyas muestras dieron positivo, encontrando una correlación estadística significativa con síntomas como dolores abdominales, fiebre o prurito. En concreto, los dolores afectaban al 39% de los pacientes positivos y sólo al 7% de los negativos.
Tabasco y cayena
Buscando un posible origen del virus, los investigadores compraron 28 productos derivados del pimiento en tiendas de Marsella. En su lista de la compra había varios tipos de pimientos frescos, salsas picantes y especias como la cayena o el curry. El 57% de ellos dio positivo para el virus. Como escriben en su investigación, "estos productos representan una fuente del virus común mediante su ingesta". El producto que presentó una mayor carga viral fue una salsa de tabasco, con casi 10 millones de partículas víricas por mililitro.
En su labor casi detectivesca, quisieron también revertir el proceso e infectar plantas con el PMMV aislado de tres productos. Las víctimas elegidas fueron varios especímenes de tabaco, Nicotiana tabacum. Los investigadores aplicaron extractos de tabasco y pimienta a las plantas. Al cabo de una semana, las hojas presentaban las lesiones típicas del PMMV en su ambiente natural. El trabajo demuestra sin duda la presencia del virus en humanos, aunque los autores piden más estudios para confirmar su carácter patógeno.
La barrera vírica entre reinos se resquebraja
De los 100 billones de microorganismos que pueblan el tracto humano, hasta ahora se han identificado pocos virus. En 2006, investigadores del Instituto de Genómica de Singapur comprobaron la presencia de una amplia variedad de virus en heces humanas. Por primera vez se detectaban patógenos de las plantas en los restos de humanos.
En septiembre pasado, investigadores de EEUU midieron la alta concentración de PMMV en las aguas residuales como indicador de la polución fecal.
Un equipo de científicos franceses cree tener pruebas de los primeros casos detectados de contagio de un virus vegetal, el del moteado suave del pimiento (PMMV), a seres humanos. De confirmarse sus resultados, podrían echar abajo uno de los paradigmas básicos de la microbiología, que dibuja una frontera infranqueable entre los virus del mundo vegetal y los del animal. También podría cuestionar el procesado industrial del pimiento: la mitad de los productos analizados tenía el virus.
Los investigadores, expertos en enfermedades infecciosas y virología del Centro Nacional de Investigación Científica (el CSIC galo), analizaron 565 muestras de heces208 de ellas procedentes de niños de residentes en Marsella y su zona de influencia en busca de la presencia del PMMV para contrastar indicios hallados por otro estudio anterior de científicos chinos. Encontraron que, en 22 adultos (el 7,2%), las deposiciones dieron positivo, mientras que sólo un niño presentó trazas del virus, según han publicado en PLoS ONE.
Estos resultados confirman que el tracto humano, además de la flora bacteriana, contiene virus de origen vegetal. Pero los investigadores querían averiguar el origen de estos patógenos y su impacto en la salud humana. Hasta ahora, la ciencia ha sostenido que, aunque se consuma un producto vegetal enfermo, este no contagia al animal o ser humano.
Con la ayuda de los hospitales de la zona y la facultad de Medicina de la Universidad del Mediterráneo, estudiaron más de cerca a 18 de los 22 adultos cuyas muestras dieron positivo, encontrando una correlación estadística significativa con síntomas como dolores abdominales, fiebre o prurito. En concreto, los dolores afectaban al 39% de los pacientes positivos y sólo al 7% de los negativos.
Tabasco y cayena
Buscando un posible origen del virus, los investigadores compraron 28 productos derivados del pimiento en tiendas de Marsella. En su lista de la compra había varios tipos de pimientos frescos, salsas picantes y especias como la cayena o el curry. El 57% de ellos dio positivo para el virus. Como escriben en su investigación, "estos productos representan una fuente del virus común mediante su ingesta". El producto que presentó una mayor carga viral fue una salsa de tabasco, con casi 10 millones de partículas víricas por mililitro.
En su labor casi detectivesca, quisieron también revertir el proceso e infectar plantas con el PMMV aislado de tres productos. Las víctimas elegidas fueron varios especímenes de tabaco, Nicotiana tabacum. Los investigadores aplicaron extractos de tabasco y pimienta a las plantas. Al cabo de una semana, las hojas presentaban las lesiones típicas del PMMV en su ambiente natural. El trabajo demuestra sin duda la presencia del virus en humanos, aunque los autores piden más estudios para confirmar su carácter patógeno.
La barrera vírica entre reinos se resquebraja
De los 100 billones de microorganismos que pueblan el tracto humano, hasta ahora se han identificado pocos virus. En 2006, investigadores del Instituto de Genómica de Singapur comprobaron la presencia de una amplia variedad de virus en heces humanas. Por primera vez se detectaban patógenos de las plantas en los restos de humanos.
En septiembre pasado, investigadores de EEUU midieron la alta concentración de PMMV en las aguas residuales como indicador de la polución fecal.
miércoles, 7 de abril de 2010
Hallada Salmonella resistente a antibióticos
Hoy he leído esta noticia en el diario Público. Me ha dado bastante miedo. Ya estamos acostumbrados por la prensa a leer sobre bacterias resistentes a los antibióticos. Ocurre que la mayoría de esas bacterias son medioambientales y causan problemas en hospitales a pacientes inmunocomprometidos. Que una bacteria patógena como Salmonella haya adquirido resistencia a un antibiótico tiene una transcendencia enorme por que estas bacterias SI pueden infectar a individuos perfectamente sanos. La salmonelosis provoca diarrea, dolores abdominales y fiebre con un perido de incubación de 7 a 28 días. Se cura con antibióticos. Que haya Salmonellas con genes de resistencia a antibióticos nos indica que están bajo presión selectiva y que por lo tanto la adquisición de resistencia a múltiples antibióticos será cuestión de tiempo. La noticia se puede leer abajo
PÚBLICO - MADRID - 07/04/2010 08:00
Un equipo de investigadores de la Universidad Complutense de Madrid ha descubierto en Reino Unido una bacteria salmonela resistente a antibióticos aminoglucósidos, fármacos habituales en el tratamiento de infecciones.
En colaboración con la Agencia de Salud de Londres, el grupo dirigido por el microbiólogo Bruno González-Zorn aisló 13 bacterias de pacientes en hospitales de Inglaterra y Gales. La mayoría de estos enfermos había viajado recientemente a India. Según publican los investigadores en Emerging Infectious Diseases, la revista oficial del Centro para el Control de Enfermedades de EEUU, las 13 muestras son clones de una misma bacteria. Su resistencia radica en un mecanismo llamado metiltransferasa del ribosoma o RmtC, hasta ahora sólo detectado en dos bacterias inofensivas en Japón y Australia, nunca antes en la Unión Europea ni en microbios patógenos como la salmonela. Los investigadores advierten del riesgo de diseminación por hospitales de todo el mundo en poco tiempo.
PÚBLICO - MADRID - 07/04/2010 08:00
Un equipo de investigadores de la Universidad Complutense de Madrid ha descubierto en Reino Unido una bacteria salmonela resistente a antibióticos aminoglucósidos, fármacos habituales en el tratamiento de infecciones.
En colaboración con la Agencia de Salud de Londres, el grupo dirigido por el microbiólogo Bruno González-Zorn aisló 13 bacterias de pacientes en hospitales de Inglaterra y Gales. La mayoría de estos enfermos había viajado recientemente a India. Según publican los investigadores en Emerging Infectious Diseases, la revista oficial del Centro para el Control de Enfermedades de EEUU, las 13 muestras son clones de una misma bacteria. Su resistencia radica en un mecanismo llamado metiltransferasa del ribosoma o RmtC, hasta ahora sólo detectado en dos bacterias inofensivas en Japón y Australia, nunca antes en la Unión Europea ni en microbios patógenos como la salmonela. Los investigadores advierten del riesgo de diseminación por hospitales de todo el mundo en poco tiempo.