Escribo para mí, para recordar algunas ideas que me interesan. Con el tiempo he descubierto que existe más o menos un nexo común en esas ideas. Aviso: Este blog no es un consultorio de salud.
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miércoles, 28 de febrero de 2018
Una estafa piramidal es una estafa piramidal
He leído este artículo publicado en "The Guardian" por el investigador Steve Caplan. El artículo tiene dos partes. Por un lado reconoce que los profesores están reclutando más estudiantes de los que toca, que la mayoría no va a poder utilizar todo lo aprendido y que eso realmente se parece a una estafa piramidal. Habiendo dicho esto parece que es crítico con todo ello. La segunda parte sirve para justificar el status quo eso si, con una pincelada de positivismo: "I almost view a graduate degree in science as a form of national (or
international) service – poor pay, but something to be proud of and with
great benefits for society as a whole" que en cristiano quiere decir: Casi veo a un licenciado en ciencias como un servicio nacional o internacional, con poca paga pero con la satisfacción de ser útil a la sociedad. Estimado Dr. Caplan, además de ser una estafa piramidal los participantes en esa estafa se les aliena desde el principio(en eso también hay un parecido con todas estas estructuras piramidales) para creer que son especiales. Eso NO es formación, es alienación. Son técnicas de control mental.
Es la academia amigo, sino lo hago yo otro lo hará
Posiblemente, tal como estén las cosas, el artículo de Steve Caplan trata de suavizar algo que en nuestro fuero interno vemos que está mal. Nuestro sistema económico excluye. Al excluir crea valor. Si algo fuese muy accesible carecería de valor. Quizás debamos entender porqué algo tan perverso como esta máxima es tan central y tan importante para la organización de nuestro sistema.
Rodrigo Rato fue ministro de economía en España y el máximo responsable de Caja Madrid, una caja que quebró y que hubo que rescatar con dinero público que no han devuelto. Entre las razones de la quiebra está que Rodrigo se iba de putas al mediodía con una tarjeta de la entidad y nadie controlaba nada. Interpelado por el juez nos explicó a todos que aquello era el mercado, amigo.
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