Escribo para mí, para recordar algunas ideas que me interesan. Con el tiempo he descubierto que existe más o menos un nexo común en esas ideas. Aviso: Este blog no es un consultorio de salud.
Un estudio autofinanciado por expertos de la Unidad de Investigación de
Enfermedades Transmitidas por Alimentos y Resistencia a los
Antimicrobianos (Unietar) de la Universidad Central (UCE) y la Universidad de las Américas (UDLA), ha demostrado por primera vez la presencia de Escherichia coli (E-coli) resistente a los antibióticos en las heces fecales de perros.
Unos alumnos me trajeron una humita, un chimbolito y un café para celebrar conmigo la publicación del artículo :)
Cautivos del mal, titulada "The bad and the beautiful", dirigida por Vicente Minelli. Fuente
En la película "Cautivos del mal" de Vicente Minelli, y guión de Charles Schnee, el personaje del productor Shields es un manipulador sin escrúpulos para quien lo esencial es el producto artístico final, tal como él lo concibe, aunque para conseguirlo deba apropiarse de ideas ajenas y rechazar la participación del que parecía su mejor amigo, enamorar a una actriz con la autoestima baja y demasiado pendiente de la botella o alejar (con desastrosas consecuencias) a la entrometida esposa de su exitoso guionista. A pesar del resentimiento frente a Shields tanto el director, como la actriz o el guionistas reconocen que nunca hubiesen alcanzado la fama si no hubiese sido por las malas artes del productor.
Lo que no te mata te hace más fuerte: la viruela dio una ventaja competitiva a los europeos
¿Por qué los incas eran tan susceptibles a la viruela? La viruela originalmente es un virus de vaca. Cuando las poblaciones de Eurasia comenzaron a domesticar la vaca, el virus comenzó a infectar a las poblaciones humanas. La mayor parte de los europeos que llegaron a América tuvieron los virus en la etapa infantil y pudieron pasar las viriasis en esa etapa, por lo que ya disponían de inmunidad natural protectora. En el caso de los indígenas, la falta de contacto previo supuso una ‘virginidad inmunológica’, una falta de respuesta defensiva frente a las nuevas infecciones y por eso, al infectarse de adultos la mortalidad era tan alta.
Los virus bacteriófagos le dan una ventaja competitiva a Pseudomonas aeruginosa
Pseudomonas en principio era una bacteria medioambiental. Vive en todo tipo de lugares, desde piscinas y spas hasta en el jabón desinfectante de hospitales. Por su extraordinaria capacidad metabólica pudo crecer en los ambientes limpios de los hospitales. Al ser los hospitales ambientes en los que los antibióticos están siempre presentes, con el tiempo se seleccionaron cepas resistentes a los antibióticos. Hoy en día, esta bacteria es la principal responsable de las infecciones adquiridas en los hospitales. Recientemente hemos aprendido de que, lo mismo que Pizarro se benefició de su historia evolutiva previa, Pseudomonas también se beneficia de un bacteriófago que antiguamente la parasitaba. Este virus bacteriofago (fago) engaña al sistema inmunitario para que este ignore a la bacteria.
Con los fagos ocurre lo mismo que con el virus del herpes labial que vive insertado en el ADN de nuestras neuronas. Sólo cuando detectan que su hospedador está estresado es cuando deciden salir de la célula que lo alberga. En el caso de los fagos rompiendo desde dentro a la bacteria, en el caso de las neuronas viajando desde el núcleo de la neurona por todo el axón hasta llegar a las células del labio en donde causa un sarpullido lleno de virus que le permite transmitirse a otro hospedador por un beso, un vaso compartido etc.
Diferencia entre fagos líticos (los que destruyen a las bacterias) y los lisogénicos (que pueden insertar temporalmente su ADN en el ADN de la bacteria hospedadora)
La bacteria y el fago, llamado Pf, establecen una relación de simbiosis
que se sospecha que está más extendida en el mundo microbiano de lo que se creía. Pseudomonas crece en las heridas abiertas de los pacientes de los hospitales. Las Pseudomonas que no tienen en su interior fagos sobreviven menos que aquellas Pseudomonas que si los tienen porque cuando el fago detecta que el sistema inmune ataca a Pseudomonas sale de entre el ADN de la bacteria, hace muchas copias de si mismo, mata a la bacteria y sale por decenas al cuerpo del paciente. Esto hace que el sistema inmunitario se dedique a matar fagos dándole un respiro a las bacterias que pueden seguir colonizando la herida abierta aunque tengan que pagar el peaje de que muchas de ellas revienten por culpa de la proliferación de los fagos. El fago "distrae" al sistema inmune como un señuelo. De esa manera, dejan de acosar a la bacteria que es el hospedador del fago. Este hallazgo ha sido publicado el pasado 28 de marzo en Science y ayudaría a explicar por qué el sistema inmunitario tolera las bacterias beneficiosas, como las presentes en el intestino, y podría guiar el diseño de mejores tratamientos para las infecciones.
Heridas abiertas infectadas por bacterias cautivas del mal
Para comprobar si los fagos influyen en el modo en el que las bacterias interactúan con sus huéspedes, el inmunólogo Paul Bollyky, de la Universidad Stanford, recogió muestras de heridas crónicas, como quemaduras infectadas, de 111 personas. De estas muestras, 37 presentaban infección por P. aeruginosa.
Bollyky y sus colaboradores encontraron que el 68 por ciento de las heridas que contenían P. aeruginosa albergaban también el virus Pf. Cuando transfirieron estas bacterias infectadas por el fago a heridas abiertas de ratones, descubrieron que el número de bacterias necesario para iniciar la infección en los roedores era menor y que estos eran más propensos a morir a causa de esas heridas que cuando eran infectados únicamente con la bacteria P. aeruginosa.
Internalización del fago Pf en una célula de mamífero. La endocitosis de Pf por las células dendríticas y otros leucocitos dispara los receptores de reconocimiento viral, los cuales suprimen la limpieza y eliminación de las bacterias. Esta imagen tridimensional fue generada utilizando microscopía confocal y imágenes apiladas en Z. Púrpura tiñe las fibras de actina, azul el ADN mediante DAPI, el verde es el fluoróforo Alexa Fluor 488 unido a un anticuerpo antiPf4. Fuente
Las bacterias atraían a unas células del sistema inmunitario llamadas fagocitos, los cuales «engullen» a las bacterias pero no a los virus. Los fagocitos intervenían en las heridas infectadas por P. aeuruginosa y Pf y se marchaban poco después de haber engullido unas pocas bacterias. Luego envíaban señales que atraían a otras células del sistema inmunitario encargadas de atacar solo a los virus del área.
Se logró reducir las infecciones causadas por P. aeuruginosa mediante la vacunación de los ratones contra los Pf, antes de infectarlos con la combinación de bacteria y virus.
La matriuska genética expande el territorio de las especies
La matriuska genética son genomas dentro de otros genomas. El caso de Wolbachia es paradigmático: la bacteria es parasitada por un virus que le da la capacidad de manipular el ratio entre sexos en especies de artrópodos. Tenemos virus, bacteria y pluricelulares trabajando juntos en un espacio común. En el caso que nos ocupa P. aeuruginosa y Pf inauguran un nuevo territorio: las heridas abiertas de pacientes de hospitales. Un nuevo territorio para P. aeuruginosa y también para el fago Pf. Los médicos tratarán a estos pacientes con antibióticos y la bacteria irá adquiriendo material genético de manera horizontal para hacer frente a esos nuevos antibióticos.
En 2015 todavía 892 millones de personas defecan al aire libre. De estos 892 millones, 9 de cada 10 vivían en zonas rurales y la gran mayoría en dos regiones: 558 millones en Asia Central y el Sur de Asia, y 229 millones en el África Subsahariana.
Las tasas de defecación al aire libre se han reducido en todo el mundo excepto en Oceanía. Fuente
La corbeta militar María Pita partió el 30 de noviembre de 1803 de la Coruña, rumbo América, con una valiosa carga a bordo: la vacuna de la viruela. Para conservar la vacuna en perfectas condiciones durante el trayecto, en una época donde no existía dispositivos para su refrigeración, se pensó en transportarla en un "recipiente humano", es decir, inyectada en la piel de personas que no hubiesen padecido viruela. Se contó para ello con 22 niños huérfanos de entre 8 y 10 años del hospicio de la Coruña, quienes fueron los protagonistas de esta empresa. Murieron tres de los niños y el resto fue adoptado por familias pudientes de los países de destino.
De brazo a brazo llega el virus vivo a América
El método de transmisión consistía en realizar en sus brazos una pequeña incisión con un bisturí, colocándose en la herida el virus sanador, que no era otra cosa que el virus de la viruela de la vaca. El virus de la vaca no es mortal para los humanos, produce unas pocas pústulas apenas. Este virus es muy parecido al virus de la viruela humana, así que si se nos pone en contacto con él, vamos a desarrollar memoria inmunológica contra el virus de la viruela humana y de esta manera quedamos protegidos.
Al poner el virus de la viruela de la vaca en la incisión producida en el brazo, el virus de la vaca penetraba en sangre y proliferaba lentamente porque no estaba completamente optimizado para hacer esa función en humanos. Cuando aparecían pústulas en el brazo, se pinchaban estas pústulas y ese líquido se volvía a poner en el brazo de otra persona a la que de nuevo se le hacía una incisión.. De esta manera, se iba transmitiendo de brazo a brazo, mediante el contacto de las heridas, operación que se hacía cada diez días para mantener en forma activa el virus.
La expedición se completaba con 500 ejemplares de ‘Tratado histórico y práctico de la vacuna’, un manual para enseñar a los médicos locales la técnica antivariólica, así como varias muestras en el portalinfas clásico.
22 ángeles. Película completa en español sobre la gesta de la Expedición Balmís
La Expedición Balmis fue la primera campaña médica internacional. Llevada a cabo por mandato del Rey de España, Carlos IV y efectuada por el médico alicantino Francisco Javier de Balmis. Una expedición de carácter filantrópico que dio la vuelta al mundo con el objetivo de llevar la vacuna de la viruela a todos los rincones del mundo que aún no tenían acceso a ella. Fue una hazaña científica jamás antes realizada y que salvó la vida a millones de personas de América y Asia.
Lámina que muestra los diferentes estadíos en la superficie cutánea de las personas vacunadas. Grabados del artista valenciano Juan Ximeno. Fuente: Biblioteca y Museo Histórico-médicos. Valencia.