Un hospital estadounidense vigila la exposición de más de un centenar de pacientes a una «superbacteria» resistente a los antibióticos anidada en un instrumento médico, que ha causado siete contagios y dos muertos. El Centro Médico Ronald Reagan de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) informó la semana pasada a 170 personas que se sometieron a una prueba endoscópica entre octubre y enero que
podrían haber sido expuestos a una enterobacteria resistente a los
carbapenemes (ERC), explicó a Efe Dale Triber una portavoz de la UCLA.
El foco de transmisión se sospecha que fueron dos endoscopios contaminados
que se utilizaron para diagnosticar y tratar afecciones pacreáticas y
del ducto biliar, según una investigación interna que ha llevado a cabo
el centro sanitario. Las enterobacterias pertenecen a una familia de bacterias que son difíciles de tratar puesto que han desarrollado una resistencia a muchos antibióticos comunes.
El hospital ha ofrecido pruebas gratuitas a los
pacientes que pudieran haber estado expuestos a la bacteria, que fue
detectada en diciembre cuando un paciente que se sometió a una
endoscopia desarrolló una infección que no pudieron tratar con
antibióticos. Al menos siete pacientes fueron contagiados, según el centro médico, y se determinó que la infección «fue un factor que contribuyó a la muerte de dos pacientes».
De momento no hay datos de nuevos afectados,
indicó Tate, pero dijo que continúan atentos puesto que si los
pacientes deciden hacerse esas pruebas, que son voluntarias, se tarda
una semana en analizar los resultados. Según Tate, aunque sólo se encontró la bacteria en dos de los siete endoscopios que tienen en el centro, «en un exceso de precaución» han avisado a todos los pacientes que se sometieron a una endoscopia entre el 3 de octubre del 2014 y el 28 de enero de este año.
El contagio ha puesto en entredicho la seguridad de los procedimientos de limpieza de estos instrumentos, ya que recientemente se han detectado contagios similares en otros hospitales del país. UCLA
retiró inmediatamente los dos endoscopios y ha reforzado el proceso de
descontaminación, aunque según adelantan algunos medios podría
enfrentarse a las demandas de algunos pacientes.
La portavoz no confirmó este extremo puesto que como política de la Universidad «nunca comentamos sobre posibles litigios». No
obstante, no correrá la misma suerte la compañía Olympus fabricante del
instrumento médico, ya que según confirmó a Efe el abogado Kevin Boyle,
ha interpuesto una demanda contra la empresa en representación de
varios afectados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Cada vez que lees un artículo y no dejas un comentario, alguien mata a un gatito en alguna parte del mundo...