La Dra Martha Clokie, del Dpto de Enfermedades Infecciosas, Inmunidad e Inflamación de la U. de Leicester ha declarado que los fagos van a jugar un papel principal en las próximas décadas: "Las soluciones que proporcionan los antibióticos están disminuyendo a un ritmo que nadie había podido imaginar con más y más bacterias volviéndose multirresistentes, esto tiene que relanzar la búsqueda de nuevos tratamientos" ha declarado.
Los virus de bacterias, conocidos como bacteriófagos que significa comedores de bacterias, o fagos como también se les conocen se unen específicamente a la membrana de las bacterias e inyectan el contenido de su cápside (la cabeza) dentro de la bacteria. El ADN del fago se multiplica y fabrica las proteínas necesarias para volver a ensamblar virus nuevos. Una vez hay más de 200 copias del virus, rompen la membrana de la bacteria y se dispersan para buscar nuevas "víctimas"
Al contrario que los antibióticos los fagos generalmente solo infectan a una cepa de una especie de bacteria determinada. Son así de específicos. Esto los podría hacer particularmente efectivos para el tratamiento de infecciones de Clostridium difficile que se vuelven peligrosas en los tratamientos con antibióticos ya que interfieren en el equilibrio con las bacterias beneficiosas del intestino. Clostridium vive en ambientes anaeróbicos, sin oxígeno, así que suelen ocultarse en pliegues de las vellosidades del intestino que son difíciles de alcanzar por los antibióticos. Cuando la mayoría de la flora bacteriana ha desaparecido entonces es su momento y colonizan en solitario el intestino cuando se ha cesa la ingesta de antibióticos.
Esta técnica con fagos se usó por primera vez en los años 20 del siglo pasado por el pionero Felix d´Herelle. Con la llegada de la penicilina fue dejada de lado en los países occidentales y sólo se continuó en el bloque soviético, especialmente en Polonia y en la República de Georgia.
Los virus de bacterias, conocidos como bacteriófagos que significa comedores de bacterias, o fagos como también se les conocen se unen específicamente a la membrana de las bacterias e inyectan el contenido de su cápside (la cabeza) dentro de la bacteria. El ADN del fago se multiplica y fabrica las proteínas necesarias para volver a ensamblar virus nuevos. Una vez hay más de 200 copias del virus, rompen la membrana de la bacteria y se dispersan para buscar nuevas "víctimas"
Fases del ciclo de un bacteriófago |
El trabajo de la Dra Clokie es la primera vez que los fagos se usan contra Clostridium difficile. El siguiente paso será desarrollar una mezcla que contenga los fagos más efectivos contra esta bacteria. Así si aparece una bacteria mutante resistente a un fago habrá otros que todavía puedan realizar su trabajo de exterminación haciendo que este producto se pueda mantener efectivo en el tiempo. Ahora se encuentra en fase I de los ensayos en personas financiado por la farmaceutica AmpliPhi.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Cada vez que lees un artículo y no dejas un comentario, alguien mata a un gatito en alguna parte del mundo...