"Estas trabajando, más que en un proyecto, en una verdadera aspiración nacional". Estas palabras, extraídas de un correo que mi amigo Carlos Arita me envió esta mañana, me hicieron saltar de la cama. El gobierno de Ecuador me ha contratado para desarrollar un proyecto para utilizar fagos como alternativa al uso de antibióticos. Ayer, el Dr Santiago Escalante de forma totalmente altruista, me estuvo ayudando a localizar una ultracentrífuga, un aparato necesario para llevar a cabo mi trabajo, en el área de Quito. Llamó a las ocho mejores instituciones en investigación: ESPE, UDLA, U Central, SOLCA (Sociedad de Lucha Contra el Cancer), IESS, Universidad Católica, INSPI y Fiscalía. Ninguna de ellas tiene este equipamiento. Lo siguiente será presentar un proyecto a la SENESCYT solicitando este aparato. Igual todo el proceso hasta que la ultracentrífuga esté instalada lleve un año. Obviamente dejé el despacho de Santiago abatido. Mi idea era la de aislar y caracterizar un fago de la manera que se está haciendo habitualmente: caracterización genómica, proteómica, microscopía electrónica, comportamiento del fago en su proceso infectivo. Posiblemente sea complicado realizar este tipo de pruebas hoy por hoy en Ecuador.
Las palabras de Carlos Arita me recordaron esta mañana que no tenía que desesperarme por no poder realizar mi proyecto de manera estandar. Quizás no lo pueda desarrollar como lo están haciendo en Irlanda, en China, pero eso mismo me libera para encontrar otras soluciones. Y debo de encontrarlas. Y aquí entra una conversación que tuve con el microbiólogo Gabriel Trueba. Gabriel me sugirió no centrarme en un fago, trabajar directamente con cien. En el momento lo descarté. Me dio la sensación de que era una idea valiosa, eso si. Hoy por la mañana me di cuenta de que podía ser la solución. En vez de centrarme en hacer un trabajo académico sobre un fago podría probar directamente un cóctel de fagos sobre animales y probar que los fagos si son una alternativa terapéutica. En estos momentos estoy pensando en el protocolo para llevar a cabo estos experimentos. Gracias Carlos, Santiago y Gabriel por apoyarme en este proceso.
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