Autores: Valentina Humprey, Luis Morales, Michael Morales y Gian Mosquera, son alumnos de Medicina de la UDLA, Quito. Entrada pendiente de revisión
Todos alguna vez nos hemos visto envueltos en una situación incómoda gracias al mal olor emanado desde nuestras, comúnmente llamado “aliento de dragón”. Esto puede ser un verdadero dolor de cabeza causándonos situaciones de incómodidad, como le paso al famoso y reconocido Clark Gable, mundialmente aclamado por la película “Lo que el Viento se llevó”, caracterizado por ser un galán y romántico empedernido. Sin embargo, el mal olor de su boca lo convirtió en una cebolla con piernas y en vez de encantar y enamorar, alejaba y ahuyentaba a sus coprotagonistas durante escenas románticas, las cuales eran un martirio. Tal como a él a cualquiera le puede pasar pero podemos estar tranquilos porque afortunadamente ¡existe una solución!
Figura 1: Clark Gable, escena de la película “Lo
que el viento se llevó”, dirigida
por George Cukor, en el año de 1939.
Fuente
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Por lo general, cada persona por las mañanas sufre este trastorno, lo que se conoce como morning breath. Afortunadamente este problema puede ser fácilmente tratado, evitando así pasar momentos de vergüenza.
Morning breath
Al despertar cada mañana y antes de uno lavarse la boca, se experimenta una situación muy bochornosa, ya que es muy desagradable saludar, ya sea con un beso o palabras a alguien, ya que el aliento mañanero tiene un olor muy peculiar, el cual nos conduce a cubrir rápidamente nuestra boca. Muchos piensan que cepillarse en la noche anterior por 10 minutos, hacer gárgaras con enjuague bucal, el uso de hilo dental, pueden enmascarar el olor insoportable de la boca al despertar, sin embargo esto es casi inevitable.
Con el fin de reconocer la presencia de agentes que causan el mal olor existen técnicas como, el uso de Monitores de sulfuros, la cual consiste en la introducción de un dispositivo flexible dentro de la boca, el paciente cierra los labios y el monitor toma una muestra de su aliento, estimando así la presencia de sulfuros, principales causantes del mal aliento.
En la boca se encuentran una gran cantidad de bacterias las cuales son necesarias para nuestro organismo, pero existen dos bacterias que provocan el mal aliento y son las bacterias Veillonella Alcalescencs y la Prevotella Melaninogenica.
La Veillonella Alcalescenscs es una bacteria redonda, la cual puede vivir debajo de la lengua ya que tiene características anaerobias, alimentándose de ácido láctico, el cual es arrojado, formando sustancias que favorecen el desarrollo de bacterias derivadas de esta misma que causan el mal olor.
Figura
2: Veillonella
Alcalescenscs. Bacteria
encontrada en la boca, pero además puede desarrollarse en los
tractos digestivo y respitarorio. Fuente
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Figura
3: Prevotella
Melaninogenica. Fuente
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Estas bacterias que habitan en la boca son capaces de descomponer alimentos proteicos o grasos, así como las propias células y la sangre de la boca, produciendo compuestos derivados del azufre que son volátiles y que confieren el desagradable mal olor al aliento: sulfuro de hidrógeno y mercaptano de metilo (olor a huevos podridos).
Existen diversos métodos para reducir y eliminar el mal aliento
Se pueden realizar tratamientos odontológicos como la profilaxis dental, la cual consiste en la remoción de placa, sarro y manchas, e incluso caries que podrían ser responsables del mal aliento, mediante procesos de limpieza, desinfección y pulido.
La disminución de microbios presentes en la boca es fundamental para amainar la halitosis. Esto mediante la aplicación de productos antibacterianos como enjuagues compuestos por cloruro de cetilpiridino, cloruro de benzalconio, aceites fenólicos, clorhexidina y extracto de sanguinarina. Existen diversos productos en el mercado que únicamente enmascaran el mal aliento, sin embargo no lo eliminan.
Se pueden encontrar enjuagues bucales con agentes oxidantes, como el peróxido de hidrógeno con propiedades bactericidas, capaz de impedir la creación de compuestos sulfúricos volátiles.
Además existen productos dentífricos y enjuagues bucales, que presentan componentes específicos tales como: bicarbonato de sodio (NaHCO3) o el cloruro de zinc (ZnCl2), capaces de convertir compuestos sulfúricos volátiles odoríferos en productos no volátiles e inodoras.
¡Vamos a hacerlo!
Nosotros como estudiantes de medicina en la Universidad de las Américas nos comprometemos a seguir investigando el tema, sobre las características y estructuras de las bacterias que causan el mal aliento y además de los medios en las que estas viven, porque en un futuro se podrá modificar a estas bacterias con el objetivo de adaptarlas de la mejor forma al ambiente de la boca.
Bibliografia:
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Velásquez, Maria. (2005). DIAGNÓSTICO Y TRATAMIENTO DE LA HALITOSIS. http://www.actaodontologica.com/ediciones/2006/3/halitosis.asp
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